Diferencia entre Naranjas de Zumo y Naranjas de Mesa: Guía Completa
¡Descubre la Diferencia entre Naranjas de Zumo y Naranjas de Mesa!
Las naranjas de zumo y las naranjas de mesa son diferentes en varios aspectos importantes que pueden influir en tu elección. Cualquier variedad de naranja se puede exprimir su zumo, incluso las mandarinas. También todas sirven para comer, si se recolectan en su momento adecuado.
¿Por qué se etiquetan “para zumo”?
Normalmente, las naranjas que se etiquetan así suelen tener alguna característica negativa que las hace no válidas para vender como naranja de mesa. Las causas más comunes son, por este orden:
- Tamaño
- Defecto visual
- Madurez
- Variedad
- Procedencia
Tamaño
Las naranjas de variedades comúnmente grandes que se han quedado pequeñas quedan fuera de los canales de exportación o comercialización normal. También hay variedades que de por sí son pequeñas. La demanda de los mercados ha ido cambiando y ahora las prefieren grandes y hermosas. Variedades como la Navelina común y la Salustiana, antes naranjas de mesa, han pasado a ser consideradas de zumo por su tamaño.
Defecto visual
No hace falta explicar que una naranja, por grande que sea, si tiene una marca de un roce con la rama, de pedrisco, de ataque de un insecto o de color extraño, va a ser considerada no válida para comer y pasa a ser para zumo.
Madurez
En las naranjas se considera madura cuando su porcentaje de azúcar, medido en escala Brix, es superior a 14. Hay variedades primerizas que tardan en llegar a ese índice. Cuando lo tienen, ya hay otras variedades que, por su tamaño, popularidad o calidad, las solapan. Esto hace que no se puedan vender como naranja de mesa. La Navelina de zonas más tardías o Navel Washington son variedades que antes eran de mesa y ahora se consideran para zumo por esta causa.
Variedad
Hay variedades que, por su genética o por el patrón que sustenta la variedad, aunque maduras, tienen un índice de acidez elevado en comparación con otras. La Salustiana y la Valencia son variedades que suelen tener niveles de acidez altos. Esto hace que, si no se recolectan muy maduras, sean consideradas para zumo. Y hay variedades que la cantidad de zumo por naranja es muy elevada. La variedad Valencia Barberina puede salir un vaso de una sola naranja. Además, tiene muy poca Limonina, causante del típico amargor cuando dejas un par de horas el zumo exprimido en la nevera. El zumo de la Barberina no amarga, incluso en días posteriores.
Procedencia
Desgraciadamente, los grandes comerciantes españoles compran naranjas en países africanos o asiáticos, fuera de las normas fitosanitarias europeas. Estos países, por ejemplo, Sudáfrica, Egipto, Turquía y Marruecos, pueden vender mucho más barata su fruta ya que no tienen condicionantes a la hora de aplicar productos fitosanitarios prohibidos por la UE, y que no se pueden aplicar en España. Además, los costes laborales y el consumo de agua son más baratos e indiscriminados.
Se importan variedades que van a tener que viajar en algunos casos hasta 3 semanas en barco. No pueden coger las naranjas maduras, las cogen antes de madurar para que puedan soportar fácilmente el trayecto hasta España. Una vez aquí, su índice Brix no es muy alto, por lo que no se pueden vender como naranja de mesa. Dado su bajo precio, es la fruta ideal para vender en grandes superficies como naranjas de oferta para zumo.
Como hemos dicho al principio, cualquier naranja puede ser considerada como “de mesa” o “para comer”, si está recolectada en su óptimo punto de maduración. También todas son buenas para hacer zumo; un zumo de mandarinas es riquísimo, el único inconveniente es la poca cantidad de zumo que consigues.